sometimes
things get so wrong
so
cold...
now then
you have to
to love her
no matter what happens ...
Autoretrato?
No estoy seguro de cómo pueda funcionar esta entrada. Algún día fue un autorretrato. Ahora, a veces soy, a veces es eco, y otras es casi un Megabyte entre todas mis Gigas de fotografía.
... 1-
...
aqua...
Mangos
Voy por la congestión de los autos de las 16:30 de un viernes. Fiestas resuenan en los pobres oidos de las personas de ciudad. Me siento sólo. Voy tarareando "I dont wana be your friend, I just wana be your lover, no matter how it end, no matter how it starts" (Radiohead). Ya no voy por la calle, solo voy dejándome andar, viviéndo desde el interior de mis párpados en los que se proyecta ese abril donde estabas tú sola mirando, que se yo, con la vista perdida, y vuelvo a ese instante en que el aire que se respiraba no podía ser otro que el que se respiraría durante un concierto de Piazzolla y Gardel, los dos juntos a la vez por allá por Argentina, un par de Bandoneones y Violines vibrando sus almas de instrumento. Vuelvo al lugar, y de repente pasas tú, estás ahí viva, con tus cabellos llevados por el ritmo del violín de Joshua Bell cuando interpreta a Shubert o a Mendelson, pero no sabes de ese abril, ni sabes de este pensamiento, y solo pasas. Detrás de ti va mi nariz silenciosa leyendo tus promesas. Diciembre. Se acercan los fríos y las lluvias, y es época de mangos y limosnas. Las personas estiran las manos por las ventanas de sus autos y arrojan los sueltos en las manos de niños que nacieron en la calle, pagan su tranquilidad y elevan las ventanas eléctricas de los autos mientras avanzan con la luz verde, pero no importa nada ya, porque pasas tú...
Sigo caminando fuera de las aceras y a metros de distancia sé que están preparando maní de dulce, porque la mejor publicidad es el mismo olor a maní, y me dan ganas de comprar fundas y fundas de maní hasta llenar la mochila, pero compro sólo una. Voy con maníes entre los dedos, voy comiéndolos de dos en dos, y voy masticándolos con los ojos cerrados, y estás ahí, en esa esencia dulce, y yo cantando "Is there anybody gone to listen to my story. All about the girl who came to stay? She's the kind of girl you want so much. Oh girl...! Girl..." Sigo caminando, y en el mercado las caceras me ofrecen frutas, trozos de ornado con las manos brillantes, empanadas de las que cae el azúcar recién puesta, me dicen: venga patroncito, mi-amorcitico-venga-pruebe, mi-rey-acá-le-servimos-el-doble. Me sonrojo y sigo mi camino, entonces me agarra de las fosas nasales un olor a mangos. Me ofrecen una caja pequeña de mangos por dos dolares con cincuenta centavos. La compro y voy cargándola hasta mi casa que no está demasiado lejos. Entro a mi casa, me lavo las manos llenas de polvo, astillas y jugo de mango, entro a mi cuarto, coloco la caja junto a la cama, comienzo a revisar mis registros fotográficos y pongo a sonar Chopin mientras te veo en la computadora y comienzo a escribir recordando tu voz, y los versos comienzan a perderse en si mismos.
Cojo un mango, lo limpio un poco y descubro que tiene manchitas negras salpicadas por aquí y por allá, descubro que mi cuarto se ha convertido en un santuario aromático y no se porqué razón comienzo a cantar: Te amaré, aunque tenga final, te amaré en lo profundo, como tengo que amar, caen débiles un par de lágrimas, te amaré como pueda, aunque no sea la paz, te amaré lo que queda, te amaré. respiro un poco y muerdo la cascara suave del mango que estuve amasando, "cuando acabe de amar, como jamás, como jamás, junto al viento, te amaré como único ser, hasta el fin de los tiempos, te amaré, y después, te amaré” y comienzo a sentir su-tu-aroma, y no dejo que se escape ni un poco de néctar, y me vienen tus senos a la mente, y "ando como hormiguita por tu espalda, ando por la quebrada dulce de la seda", y de repente quiero tratarte como se le trata a un mango en épocas de diciembre, mirarte como siempre te he mirado, amante secreto de tu imagen, y quiero desprenderte de a poco y sin pena la primera prenda, comenzar a lamerte toda, lamer tus prendas. y comenzar a abrirte (poner Santana para vibrar nuestras pieles con su guitarra) irte desnudando de a poco, y sigo abriendo mangos por todos lados, y mi cuarto aparte de ser un santuario de aroma dulce, es un lugar donde suena una y mil guitarras, todas juntas mientras me enredo la boca en tus cabellos. Soy un hombre que ya no quiere comer carnes, ni azúcar, ni vino, ni nada, quiero comerte sóla, como me empiezo a comer los mangos de esta caja de madera seca, que van todos pegados unos a otros por el dulce en el que habita tu alma, y mientras me empalago por la boca y por todos los poros de tus fluidos, me dan ganas de mascarte, detenerlo todo y que entremos por alguna puerta o por ninguna, y abro otro mango y lo chupo como me chuparía tus labios, y abro dos más, y me amamanto como lo haría de tus senos, y alegre escuchando un Jazz me muero de ganas por probar tu sexo como hago con 10 mangos abiertos y lamo sus cáscaras una a una manchado la cara, y me elevo a las cumbres del sabor, y sin estar contigo descubro que estoy empalado el alma de tu alma, y no tengo ganas de volver a probar otra nunca más. Tu almíbar se escurre por los labios de mi alma.
Ninguna clase de despedida, más bien re-encuentro
Insisto no estaré. Quiero estar
te siento. No te mueves.
Y estás.
No me voy (no insisto)
Solo miro. Solo pienso
Pero dentro de mi permaneces
No te canses. No dejes de estar en ti
porque me pierdo en mi
Baúl de Fotogramas
Comienzo a escuchar "Sur le Fil", y abro el muro de fotografías de Aurore Dubois, sorprendido por la galería en blanco y negro, donde el blanco fluye y el negro complementa, nunca se volverían sobras, pero sí sombras; su nariz está en el centro de cada imagen, su mirada es esquiva, también distante pero a la vez fija, quieta, permanente, simple, lo contrario de una "Amélie" (es la una me comenta blanquita), una foto que ha llamado mi atención es cuando mira el texto del guión que ha sido enviado, seguramente la escena saldrá bien, será "una escultura en el tiempo" como cada imagen de Aurore D.
En palabras del poeta
Entre el ojo y la forma
hay un abismo
en el que puede
hundirse la mirada
J. A. Valente:
Me ahogo entre Francia y este mi asiento, sentado permanezco, sólo viendo, no más voyeur (no tuyo y tampoco tuyo); esto ya tiene más de quien escribe que de la obra, aunque ahora se justifica, mi ahogo
¿No es acaso el errar
por los pozos sin nombre
la pura agitación donde muere el pájaro
(lo que mantiene vivas las alas)?
P. Briceño
"Sur le Fil" a sonado de cuatro álbumes distintos, siendo en cada versión una nueva obra, que se funde con Aurore y David, se juntan en un polo de quarks, una relación cuántica, medida por la distancia, por "la agitación […] que mantiene vivas las alas".
Las rejas a las que está atada Aurore, o más bien a las que sostienen su mirada, reja tras otra reja, reja que se vuelve sólida, como roca sólida, negra roca.
Y en el baúl de los fotogramas un maestro de la comedia francesa (¿Aurore has visto a Tatischeff?), una obra pura, donde "Tati sólo se interesó por el sonido tras haber entendido que el diálogo debía ser considerado, según la esclarecedora fórmula de Georges Sadoul, como -un ruido entre otros".
Un filo en bicicleta David, en cada filo dos límites, vaivén de sonidos, ruidos, silencios; vuelvo a Tati para recordar lo leído (de Serge Toubiana -Director de la cinemateca Francesa) "Tati captó algo esencial: el paso del tiempo, la evolución del mundo, desde la vida rural (el cartero de Día de fiesta, las guirnaldas, la vida bufona y campestre) hasta la ciudad moderna y futurista de PlayTime." (¿en cuál vives Aurore?) ¿en cuál vives David?. ¿En cuál vivo?.
Frente a mí aún tengo una lista incompleta con Baudelaire, Balzac, Proust, La Fontaine, Buñuel, Descartes, Kant, Hume, Tarkovski, W. H.Fassbinder, Quentin Tarantino, Martin Scorsese, François Truffaut, Jean-Luc Godard, Serguéi Eisenstein, Fatih Akhin, Howard Hawks, Alfred Hitchcock, Jean Renoir, Francis Frod Coppola, Alain Resnais.
Ahora tiempo imprescindible para retomar la lectura de Tarkovski: El ícono y la pantalla. ¿David, Aurore me acompañan?, ¿César, Mariana me acompañan y acompañan a David y Aurore?. Seguro mañana volver a ver "Fugue [1998] - Georges Schwizgebel" gracias al Duque de la Deshonra.